SIBO - Sobrecrecimiento Bacteriano Intestino Delgado
Descripción
A diferencia del intestino grueso, en el intestino delgado se encuentra un número muy escaso de bacterias. De hecho, se considera que este tejido es casi estéril y esto es clave para que no se produzca competencia a la hora de absorber nutrientes. Cuando se produce un sobrecrecimiento bacteriano en el intestino delgado o SIBO, las bacterias colonizan la mucosa intestinal y compiten por la absorción de nutrientes, dando lugar a problemas de malabsorción o carencias nutritivas. Los síntomas que pueden aparecer incluyen pérdida de peso, distensión abdominal, flatulencias, anemia, o diarrea, entre otros.
Las causas más comunes de aparición del SIBO son enfermedades inflamatorias intestinales (como por ejemplo la enfermedad de Crohn), diabetes, celiaquía, intolerancia a la fructosa, ...
El SIBO daña las células del intestino delgado, provocando alteraciones molestas y dolores para la persona. El objetivo de la realización del test SIBO es diagnosticar el trastorno para poder tomar las medidas correctoras y así poder revertir y equilibrar la flora intestinal.
¿Qué incluye el test?
¿A quién va dirigido?
- Presencia de síntomas compatibles con SIBO: distensión abdominal, flatulencias, diarrea, pérdida de peso y déficits nutricionales.
Antes de realizar la prueba se tienen que seguir las indicaciones siguientes:
- No haber realizado tratamiento antibiótico las 4 semanas previas.
- No tomar medicamentos procinéticos ni laxantes 1 semana antes.
- Realizar un ayuno de 12 horas antes de realizar el test.
- No tiene que fumar, beber, masticar chicle o lavarse los dientes las 12 horas previas al test.
- Evitar cualquier colonoscopia o endoscopia un mes antes del test.